En busca de la felicidad

Por @dpixu

REAL BETIS BALOMPIÉ. (3º CLASIFICADO. 33 PUNTOS)

2014 ha sido un desastre para los verdiblancos. Caos institucional, eliminación de la Europa League a manos del eterno rival y descenso a la Segunda División. En definitiva, el Betis empezó 2014 siendo un club que viajaba por Europa y lo ha acabado siendo un club a la deriva.

Tercer clasificado con 33 puntos. 26 goles a favor y 19 en contra.

Irregularidad por bandera. Con Velázquez –segundo batacazo en clubes con aspiraciones tras el fracaso en Villarreal-, el equipo vivía en un estado de nervios continuo y soportaba una presión desmedida. La presión es lógica debido a la dimensión social y a que está en un lugar que por historia no merece, pero el ex-entrenador no supo canalizarlo para transformar esa presión en ambición.

Pero apareció Merino, y con él, cuatro victorias consecutivas que deja a los béticos a solo tres puntos del ascenso. Con Merino –previa destitución de Velázquez- la afición bética volvió a creer en su equipo. Ese equipo que debería arrasar en Liga, por plantilla, por nombre, por afición.  Y espera un 2015 cargado de ilusión con el regreso de Pepe Mel. Buscan la felicidad.

POSITIVO.

·       Plantilla muy superior a cualquiera de la categoría.

·       Rubén Castro. Tener en tu plantilla a un jugador como Rubén Castro es un lujo que para un equipo en Segunda División es totalmente irremplazable y casi irrealizable. Por fortuna, siguen quedando algunos románticos en este fútbol-negocio y decidió quedarse en Heliópolis para hacer historia.

·       Pepe Mel. Entrenador de sobrada categoría. Si le dejan trabajar, el Betis será o quedará muy cerca de ser campeón.

A MEJORAR.

·       Irregularidad. Tanto talento, puede conllevar que si no es bien gestionado o si no se dispone en favor del equipo a momentos de locura que puedan llevar a perder muchos puntos.

·       La adaptación de Pepe Mel. Puede ser contradictorio, pero con Merino el equipo cuajó grandes actuaciones unidas a la suerte necesaria para ganar partidos. Mel es un grandísimo entrenador conocedor de toda la dimensión bética, por lo que la adaptación no debe ser un problema.

·       Presión. Ese “ruido” que volverá a escucharse en cuanto encadenen dos resultados negativos. La plantilla deberá abstraerse de todo y unirse para superar los escollos

Qué bueno que viniste.

PRIMERA EVALUACIÓN: NOTABLE BAJO.

Somos generosos en la nota. Y gran parte de culpa la tiene Merino. Con Velázquez el equipo no estaba aprobando, ni por sensaciones ni por juego ni por supuesto, por resultados. Notable bajo.